Un mes de lucha universitaria: paro nacional y medidas escalonadas para exigir recomposición salarial

Docentes y no docentes de las universidades nacionales reclaman por la apertura de paritarias y denuncian un vaciamiento institucional
Desde este lunes y hasta el próximo domingo, los trabajadores docentes y no docentes de las 57 universidades nacionales llevan adelante un paro nacional de una semana completa, en el marco de un nuevo capítulo del plan de lucha por la recomposición salarial y la defensa de la universidad pública.
La medida, votada en el último Congreso Extraordinario de CONADU Histórica, incluye no solo la suspensión de actividades sino también acciones de visibilización en las distintas sedes universitarias y espacios públicos, que comenzarán mañana. Además, el gremio anunció que a partir de la semana próxima, entre el 18 de agosto y el 7 de septiembre, se realizarán paros de 48 horas todas las semanas, en días rotativos, para sostener la presión sobre el Gobierno nacional.
En un comunicado difundido tras el congreso, CONADU Histórica denunció que desde la asunción de Javier Milei no se convocan paritarias, incumpliendo el derecho constitucional a la negociación colectiva. “Los salarios de la docencia universitaria y preuniversitaria sufren el peor atraso de la historia”, señalaron, destacando que la pérdida de poder adquisitivo supera el 50% en algunos casos.
La organización también advirtió sobre un proceso de vaciamiento institucional, que se traduce en la renuncia masiva de docentes, problemas para cubrir vacantes y el deterioro de las condiciones de enseñanza e investigación. Según datos del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), en los últimos meses se registraron unas 10.000 renuncias de profesores y auxiliares, una situación inédita desde el regreso de la democracia.
El comunicado gremial alertó que, mientras los salarios se licúan, las obras sociales universitarias están al borde de la quiebra, las cajas jubilatorias pierden capacidad de cobertura y la continuidad del ciclo académico 2025 está en riesgo. “Se pone en juego la vida de la propia universidad”, enfatizaron.
Las actividades de visibilización previstas para esta semana incluyen clases públicas, charlas abiertas y festivales culturales, con el objetivo de explicar a la sociedad el impacto del ajuste en las universidades y de sumar apoyo a la causa. En varias ciudades, los gremios docentes convocarán a conferencias de prensa conjuntas con organizaciones estudiantiles, que también enfrentan recortes en becas y programas de comedor universitario.
El conflicto universitario no es nuevo: ya en el primer cuatrimestre del año, las federaciones gremiales habían protagonizado masivas marchas en defensa de la educación superior, alertando que la política presupuestaria del Gobierno pone en riesgo la gratuidad y el carácter federal del sistema universitario. Sin embargo, la falta de respuesta oficial y la escalada inflacionaria han llevado a un endurecimiento de las medidas.
En este contexto, los sindicatos advierten que la única vía para destrabar el conflicto es la apertura inmediata de paritarias y la actualización salarial acorde a la inflación. “No estamos hablando de privilegios, sino de condiciones mínimas para que las universidades sigan funcionando y formando profesionales en todo el país”, remarcan.
El mes de lucha que inicia hoy marcará un nuevo punto de tensión entre el Gobierno nacional y el sistema universitario. La apuesta gremial es sostener la movilización y el paro escalonado hasta lograr un cambio en la postura oficial, mientras crece la preocupación por el impacto que esta crisis tendrá en el segundo cuatrimestre y en el futuro inmediato de la educación superior argentina.