Residencias médicas: ordenan repetir el examen a 268 postulantes por sospechas de fraude

El Gobierno nacional detectó irregularidades en las calificaciones del examen de ingreso a residencias y tomó una medida inédita: quienes hayan obtenido más de 86 puntos deberán rendir nuevamente. El foco está puesto en egresados de universidades extranjeras.
El Ministerio de Salud de la Nación, con respaldo del Gobierno nacional, resolvió anular parcialmente los resultados del último examen único para el ingreso a residencias médicas. La decisión alcanza a 268 postulantes que obtuvieron una calificación superior a los 86 puntos, quienes deberán volver a rendir la prueba tras detectarse posibles irregularidades en la evaluación.
El anuncio fue realizado por el vocero presidencial Manuel Adorni, quien confirmó en conferencia de prensa que se trata de una medida preventiva para preservar la transparencia del sistema, ante lo que calificó como “notas sospechosas” por parte de ciertos aspirantes.
Puntajes desproporcionados y antecedentes que no cierran
La investigación se inició a raíz de incongruencias entre los resultados obtenidos en el examen nacional y los antecedentes académicos de varios postulantes, en especial de profesionales egresados de universidades extranjeras. Según precisó Adorni, varios de los que alcanzaron los puntajes más altos del ranking “no registraban antecedentes destacados ni figuraban en puestos relevantes en pruebas anteriores”.
El caso que encendió las alarmas fue el de la Universidad Técnica de Manabí, ubicada en Ecuador. Nueve de sus egresados se ubicaron entre los primeros 27 puestos del ranking, un hecho sin precedentes que no se condice con el rendimiento histórico de la institución en este tipo de exámenes.
Además, se detectaron diferencias sustanciales entre los resultados del examen nacional y los obtenidos previamente en pruebas tomadas por hospitales privados, donde los mismos candidatos no habían demostrado desempeños comparables.
Una medida para “salvaguardar la equidad del proceso”
Adorni subrayó que la decisión de repetir el examen no implica una acusación directa de fraude contra los profesionales, pero sí responde a la necesidad de “salvaguardar la equidad y transparencia del proceso de selección”, que define el ingreso a un eslabón clave de formación médica en el país.
“Se detectaron anomalías que no pueden dejarse pasar, especialmente cuando se trata de un sistema que debe garantizar mérito, calidad y preparación”, expresó el vocero presidencial. La medida fue consensuada con autoridades sanitarias nacionales y de distintas jurisdicciones, y ya fue comunicada a los afectados.
Preocupación en el ámbito académico
La decisión generó repercusiones inmediatas entre los postulantes y en sectores de la comunidad médica. Algunos de los profesionales alcanzados por la resolución expresaron su malestar a través de redes sociales, mientras que entidades que agrupan a médicos en formación solicitaron que se brinden garantías de imparcialidad para el nuevo examen, cuya fecha aún no fue confirmada oficialmente.
Desde el Ministerio de Salud indicaron que se están evaluando medidas complementarias para reforzar los controles y evitar que este tipo de situaciones se repita en el futuro. En ese sentido, no se descarta el uso de tecnologías de supervisión remota, validación cruzada de antecedentes académicos y auditorías externas durante las próximas convocatorias.
Un sistema bajo presión
El ingreso a residencias médicas es un proceso clave para la formación de profesionales de la salud en el país. Cada año, miles de postulantes compiten por lugares en hospitales públicos y centros de salud de todo el territorio nacional, en un examen que históricamente ha sido considerado una instancia meritocrática central para la carrera médica.
Este escándalo pone en entredicho la transparencia del sistema y genera preocupación tanto por su impacto inmediato como por las posibles consecuencias a largo plazo sobre la confianza de los profesionales y la calidad del proceso formativo.
A la espera de la nueva fecha
Por el momento, el Ministerio de Salud no ha anunciado oficialmente cuándo ni cómo se tomará el nuevo examen a los 268 postulantes involucrados. Lo que sí está claro es que el proceso volverá a llevarse adelante bajo estrictas medidas de control, en un intento por restaurar la legitimidad del concurso y evitar mayores conflictos legales o institucionales.
Mientras tanto, el episodio reaviva el debate sobre la homologación de títulos extranjeros, los mecanismos de control y la necesidad de fortalecer los criterios de evaluación en el sistema de salud argentino.