Protestas por Detenciones en Manifestación en Congreso

Ayer, en el Servicio Paz y Justicia de Argentina (SERPAJ), se llevó a cabo un encuentro cargado de emotividad y reclamo. Familiares, amigos y diversas organizaciones de derechos humanos, políticas, sociales y gremiales se reunieron para exigir la liberación inmediata de las 16 personas que aún permanecen detenidas tras la manifestación en el Congreso en protesta contra la Ley Bases. Este evento fue un paso más en el camino de una lucha que hoy tendrá continuidad en Plaza de Mayo, con una nueva protesta convocada para las 16:30 horas.
La situación judicial de los detenidos ha generado un fuerte repudio por parte de las organizaciones presentes, especialmente después de que el fiscal Carlos Stornelli solicitara prisión preventiva para los 33 inicialmente detenidos, imputándolos por los delitos de “terrorismo” y “sedición”. La jueza María Servini, tras las indagatorias, decidió excarcelar a 17 personas, pero dejó pendiente la situación de los restantes 16, quienes enfrentan cargos graves y aún aguardan una decisión judicial definitiva.
Entre los detenidos se encuentran individuos como Camila Juárez Oliva, estudiante de sociología en la UNSAM y madre de dos niños pequeños, y Nicolás Mayorga, estudiante de Relaciones Internacionales y administrativo en Telefé. Mayorga, además, es reconocido por su participación en la asamblea de su barrio y por su título de maestro ajedrecista. Su detención, marcada por el uso de la fuerza y la falta de asistencia médica adecuada tras recibir dos balazos en la pierna, ha sido denunciada como desproporcionada e injustificada por sus familiares.
Otro caso destacado es el de Gabriel Horacio Famulari, estudiante de Kinesiología en la Universidad Nacional Arturo Jauretche (UNAJ), quien fue detenido en Constitución, distante del área donde se desarrollaba la manifestación. Su situación ha causado preocupación en la comunidad universitaria, que sigue de cerca el desarrollo del caso y exige su liberación.
Las organizaciones presentes en el SERPAJ enfatizaron la necesidad de mantener la presión y visibilizar estos casos para evitar que la situación de los detenidos caiga en el olvido. Rechazaron las acusaciones de “terrorismo” y “sedición”, considerándolas una criminalización de la protesta legítima y pacífica.
“Lo que pedimos es que sigamos aquí, porque aún hay compañeros detenidos que deberían estar con nosotros en la calle. Este gobierno busca amedrentar a quienes luchan, pero nosotros seguiremos luchando por la libertad de todos los presos por luchar”, declararon desde CORREPI, la coordinadora contra la represión policial e institucional.
La jornada en Plaza de Mayo hoy se perfila como un nuevo capítulo en la movilización social en Buenos Aires, donde la comunidad espera que las voces de reclamo por la libertad de los detenidos sean escuchadas y atendidas por las autoridades judiciales.