Ola de calor en el AMBA: Más de 32.000 usuarios sin luz

La ola de calor extremo que afecta al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) ha provocado serios problemas en el suministro eléctrico, dejando a más de 32.864 usuarios sin energía, según el Ente Nacional Regulador de la Energía (ENRE). Las interrupciones en el servicio han generado una ola de reclamos y preocupación en redes sociales, especialmente en barrios porteños como Villa del Parque y Parque Avellaneda.
Situación crítica en la Ciudad y el Conurbano
De acuerdo con los datos oficiales, 26.282 hogares en la Ciudad de Buenos Aires permanecen sin luz, siendo la empresa Edesur la más afectada. Un residente de Villa del Parque comentó: “Ya pasaron 13 horas y seguimos sin luz”, reflejando la desesperación de quienes enfrentan temperaturas que superan los 35°.
Además, un video viralizado en redes muestra un incendio en la subestación de Parque Avellaneda, señalado como una de las causas principales de los cortes en esa zona.
Impacto del calor extremo
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió que las altas temperaturas persistirán toda la semana, alcanzando un pico de 36° el jueves, lo que podría intensificar los problemas de suministro debido al aumento del consumo energético. Aunque se anticipan lluvias para el viernes, solo hay un 40% de probabilidad, insuficiente para aliviar la situación.
Frente al pico de consumo esperado, las autoridades y las empresas eléctricas han implementado planes de cortes programados para evitar el colapso del sistema. Sin embargo, la falta de planificación a largo plazo sigue siendo un tema recurrente en los reclamos ciudadanos.
Reclamos y promesas incumplidas
La crisis energética en el AMBA no es nueva y ha estado en el centro de la agenda pública en los últimos años. Usuarios de redes sociales expresaron su indignación: “Siempre lo mismo, llega el verano y nos dejan sin luz. ¿Dónde están las inversiones que prometieron?”.
En la noche del jueves, la situación alcanzó su punto crítico con más de 70.000 usuarios afectados, aunque durante el viernes los números se estabilizaron por debajo de los 50.000. A pesar de ello, las soluciones estructurales parecen estar lejos de concretarse.
Perspectivas y desafíos
La ola de calor pone en evidencia la fragilidad del sistema eléctrico en el AMBA, así como la falta de inversiones suficientes para garantizar un suministro estable. Mientras los usuarios reclaman soluciones inmediatas, las empresas distribuidoras y las autoridades gubernamentales deberán enfrentar un desafío urgente: mejorar la infraestructura para evitar que esta situación se repita cada verano.
La expectativa ahora recae en la capacidad de respuesta de Edesur y Edenor para atender los cortes, y en las medidas que el Gobierno adopte para mitigar una problemática que afecta directamente la calidad de vida de millones de personas.