La Marcha del Orgullo 2024: un grito por derechos y justicia en tiempos de retroceso

Este sábado, Buenos Aires vivirá una edición histórica de la Marcha del Orgullo, la 33ª desde que comenzó en Argentina en 1992. Bajo las consignas “No hay libertad sin derechos ni políticas públicas”, “No hay libertad con ajuste y represión” y “¡Ley Integral Trans y Ley Antidiscriminatoria ya!”, la manifestación tomará las calles desde Plaza de Mayo hasta el Congreso Nacional. Este año, sin embargo, la marcha tiene un matiz especial: se trata de la primera que se realiza en oposición al gobierno de Javier Milei, cuya gestión, de marcado corte ultraderechista, ha generado preocupación en la comunidad LGBTQ+ y en organizaciones de derechos humanos debido a la implementación de políticas restrictivas y discursos cargados de homofobia y misoginia.
La convocatoria, organizada por una comisión de activistas, promete ser una jornada de protesta masiva y contundente frente a lo que consideran un retroceso en los derechos conseguidos en las últimas décadas. La Comisión Organizadora ha enfatizado que la lucha será pacífica pero firme, con la participación de miles de personas, quienes además del tradicional desfile, alzarán carteles y banderas con mensajes de resistencia y unidad.
Una marcha con historia, en defensa de derechos adquiridos
Desde las 10 de la mañana, Plaza de Mayo y Plaza Congreso serán escenarios de actividades que incluirán espectáculos musicales, shows de comparsas y la participación de artistas comprometidos con la causa LGBTQ+. Figuras reconocidas como Valeria Lynch, Taichu y Natalie Pérez, entre otros, estarán presentes, junto a personalidades del activismo como Franco Torchia y BB Asul, quienes actuarán como conductores en distintos tramos del evento.
A las 15:30 horas, se realizará un “pañuelazo contra el negacionismo del terrorismo de Estado”, marcando un punto de encuentro para los asistentes en Diagonal Norte y Florida, donde se rendirá homenaje a los 30 mil detenidos desaparecidos durante la dictadura. El acto, que culminará en una marcha hacia el Congreso, busca reivindicar la lucha por la memoria, verdad y justicia, en colaboración con organizaciones como H.I.J.O.S. Capital y Orgullo y Lucha.
Un contexto de preocupación ante las políticas de Milei
Desde su llegada al poder, Javier Milei ha aplicado medidas y discursos que generaron rechazo en los sectores de diversidad sexual y de derechos humanos. En febrero, el presidente impulsó el cierre del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), después de semanas de ajustes y despidos en el organismo. Meses más tarde, en junio, disolvió el Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, reduciéndolo a una subsecretaría antes de su cierre definitivo. Estos movimientos fueron acompañados por el desfinanciamiento de programas de asistencia para mujeres en situación de violencia y del servicio de atención telefónica 144.
Milei ha cuestionado abiertamente políticas de inclusión y derechos humanos. En un polémico posteo en redes sociales, comparó los derechos básicos como vivienda, salud y educación con el “progresismo” y el “mundo carcelario”, en un intento por deslegitimar estas conquistas bajo la premisa de una retórica ultraconservadora. Además, en una reunión con el expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, Milei recibió una medalla de “honor” en reconocimiento a su alineación con posturas conservadoras y de rechazo a la diversidad sexual, lo que generó aún más inquietud en la comunidad queer.
“Los discursos de odio también matan”: denuncias y consignas
Durante esta 33ª Marcha del Orgullo, una de las consignas más repetidas será: “Los discursos de odio del Gobierno y de algunos medios de comunicación también matan. ¡No es libertad, es odio!”. La comunidad ha denunciado que estos mensajes, respaldados por políticas públicas restrictivas, fomentan la intolerancia y aumentan la vulnerabilidad de los colectivos LGBTQ+, especialmente tras el caso de mayo en el que tres mujeres fueron asesinadas en un triple lesbicidio en Barracas. La respuesta del gobierno ante este crimen, calificada como fría e insensible, fue condenada por los organizadores de la marcha, quienes también llevarán carteles en memoria de las víctimas.
Para muchos, esta marcha es un llamado urgente a detener el avance de discursos que atentan contra la dignidad y los derechos humanos. En este contexto, la consigna “¡Ley Integral Trans y Ley Antidiscriminatoria ya!” cobra especial relevancia, como un pedido a proteger a los colectivos vulnerables y garantizar un marco jurídico inclusivo en un escenario donde estos derechos se ven amenazados.
El legado de Carlos Jáuregui y el abrazo a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo
La marcha de este año también será un homenaje a Carlos Jáuregui, pionero de la visibilidad LGBTQ+ en Argentina y fundador de las primeras marchas del Orgullo en el país. “Madres y Abuelas fueron quienes abrazaron y apoyaron en vida a nuestro querido compañero Carlos Jáuregui”, recordó la organización en un comunicado, aludiendo a la conexión histórica entre las luchas por los derechos humanos y la diversidad. Durante la manifestación, se alzarán pancartas con mensajes de apoyo a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y se recordará a los 400 LGBTI desaparecidos durante la última dictadura.
En un país donde el respeto por los derechos humanos ha sido un pilar fundamental en la construcción de la democracia, la Marcha del Orgullo de este año busca consolidar un mensaje claro y firme: la libertad y la igualdad deben ser derechos universales, inalienables y protegidos frente a cualquier intento de retroceso.