Javier Milei y Jorge Macri sellaron la reconciliación con un abrazo en Casa Rosada
El presidente y el jefe de Gobierno porteño compartieron un encuentro cordial en el marco de la reunión con gobernadores por la reforma laboral. “Fue un reencuentro muy agradable”, afirmó el mandatario de la Ciudad.
Del desplante al saludo afectuoso
El presidente Javier Milei y el jefe de Gobierno porteño Jorge Macri protagonizaron este martes un gesto de reconciliación durante la reunión con gobernadores convocada en Casa Rosada para debatir el proyecto de reforma laboral.
El encuentro marcó el fin de la tensión pública que había quedado tras el desplante del Presidente durante el Tedeum del 25 de mayo, cuando Milei evitó saludar al mandatario capitalino en la Catedral Metropolitana.
Esta vez, el saludo fue distinto: Milei se acercó, lo abrazó y lo llamó “Jorge, querido”, según quedó registrado en los videos oficiales difundidos desde el Salón Eva Perón.
“Nos saludamos muy bien con Milei. Yo siempre digo lo mismo: nosotros elegimos trabajos complejos y los problemas personales o las cosas que a uno le pueden incomodar son secundarias”, declaró Jorge Macri ante la prensa al salir del encuentro.
“He compartido momentos felices y otros más tensos. Hoy fue un reencuentro muy agradable. Y eso lo valoro”, añadió.
Un gesto político en medio del debate por la reforma laboral
La reunión en Casa Rosada se realizó en el marco de la discusión sobre la reforma laboral impulsada por el Gobierno nacional, que busca modificar las regulaciones en materia de indemnizaciones, contrataciones y contribuciones patronales.
Junto con Jorge Macri participaron gobernadores oficialistas y opositores, entre ellos Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Nacho Torres (Chubut) y Maximiliano Pullaro (Santa Fe), además de representantes de las provincias del norte y del centro del país.
Fuentes oficiales describieron el ambiente como “distendido y cordial”, en contraste con los cruces que habían caracterizado la relación entre la Casa Rosada y la administración porteña en los últimos meses.
El abrazo entre Milei y Macri fue leído en clave política como una señal de acercamiento dentro del espacio liberal-conservador, especialmente tras los roces ocurridos en mayo y las diferencias por la coparticipación y el control de la Policía de la Ciudad.
El futuro del PRO y la relación con La Libertad Avanza
El gesto conciliador ocurre pocos días después de que el expresidente Mauricio Macri —tío de Jorge y líder del PRO— afirmara que el partido “está más vivo que nunca” y no descartara competir con candidato propio en 2027, pese al acuerdo electoral que mantuvo con La Libertad Avanza (LLA) para los comicios legislativos del 26 de octubre.
Consultado sobre esa posibilidad, Milei respondió que no le molesta y que ve “con buenos ojos que el PRO siga activo en política”.
“Que haya distintos espacios dentro de un mismo proyecto liberal es algo positivo. Cuanta más competencia sana haya, mejor para todos”, sostuvo el Presidente, según fuentes oficiales.
Un nuevo capítulo en la relación Milei–Macri
El vínculo entre el Presidente y el jefe de Gobierno porteño había quedado dañado tras el episodio del Tedeum, cuando Milei evitó el saludo institucional en plena ceremonia religiosa. Aquella escena, ampliamente difundida por los medios, fue interpretada como un quiebre entre la administración nacional y la Ciudad.
El reencuentro en Casa Rosada, sin embargo, marca un cambio de tono y parece abrir una etapa de cooperación política más pragmática.
“Siempre voy a priorizar el diálogo institucional por encima de las diferencias personales. Los porteños necesitan que trabajemos juntos”, enfatizó Jorge Macri tras el encuentro.
Con este gesto, Milei y Macri dejaron atrás los roces y dieron una señal de unidad coyuntural, en un contexto donde el oficialismo busca tejer consensos legislativos para avanzar con su agenda económica y laboral.
