Grave amenaza contra el secretario general de ATE: un usuario de Instagram pidió su “desaparición” en la red social

El hecho fue denunciado penalmente por el gremio. Rodolfo Aguiar alertó sobre un clima de violencia alentado desde “las más altas esferas del poder”.
En la antesala del paro general convocado por trabajadores estatales contra las políticas de ajuste del Gobierno nacional, el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Rodolfo Aguiar, fue amenazado de muerte y de desaparición por un supuesto militante libertario a través de redes sociales. El ataque fue denunciado ante la Justicia por el equipo legal del sindicato y generó una fuerte reacción en el movimiento sindical.
“Se trata de un hecho grave que no podemos dejar pasar”, afirmó Aguiar tras conocerse la amenaza, difundida desde la cuenta de Instagram del usuario identificado como “@charlybenitees”. En la publicación, el agresor compartió una imagen del dirigente junto con un mensaje explícitamente violento: “Rezá por tu vida que no te cruce nunca en la calle, te juro voy preso pero le hago un bien enorme a la patria. Hay que hacer desaparecer a esta bosta que todos los días insiste con el terrorismo”.
La publicación, que además instaba a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich a que “lo meta preso de una vez”, representa una incitación directa a la violencia física contra el secretario general de uno de los gremios más representativos del país.
Aguiar: “Esto es una conducta delictiva habilitada desde el poder”
El dirigente sindical no dudó en vincular el ataque con el clima político actual, que —según denunció— ha sido fogoneado desde el Ejecutivo nacional. “La gestión que conduce Javier Milei corre los límites de la democracia”, sostuvo Aguiar, al tiempo que remarcó que este tipo de expresiones “se habilitan desde las más altas esferas del poder”.
“Intentan infundirnos miedo, atemorizarnos, pero van a fracasar. Los tenemos que poner en evidencia y deben ser condenados”, enfatizó el secretario general de ATE, quien recordó que las amenazas no solo constituyen un delito, sino que representan una afrenta a los derechos y garantías constitucionales.
Denuncia penal y pedido de intervención judicial
Tras el episodio, el equipo jurídico de ATE presentó una denuncia penal formal ante la Justicia, exigiendo que se investigue la identidad del agresor y se tomen medidas urgentes. Desde el gremio señalaron que, hasta el momento, “la Justicia ha sido la gran ausente” frente al creciente hostigamiento contra referentes sindicales y sociales.
La denuncia se apoya en el Artículo 149 bis del Código Penal argentino, que establece penas de entre seis meses y dos años de prisión para quien “hiciere uso de amenazas para alarmar o amedrentar a una o más personas”. En este caso, la gravedad del mensaje y su difusión pública agravan la situación, dado que no se trata solo de una amenaza aislada sino de una manifestación con potencial incitación al odio y a la violencia política.
Preocupación por la escalada de violencia y hostigamiento en redes
El episodio se enmarca en un contexto de creciente polarización política y social, en el que diversos dirigentes gremiales, periodistas y figuras públicas han denunciado campañas de hostigamiento digital por parte de usuarios afines al Gobierno nacional.
“Estamos ante un ataque sin precedentes a todos los derechos constitucionales”, señalaron desde ATE en un comunicado oficial. En el mismo, expresaron su solidaridad con Aguiar y advirtieron que este tipo de agresiones buscan “disciplinar” la protesta social mediante el miedo.
Organismos de derechos humanos también se pronunciaron sobre el hecho, reclamando una condena política contundente del oficialismo y una rápida intervención judicial para investigar al autor de la amenaza y garantizar la integridad física del dirigente sindical.
Un paro general en un clima de tensión
El hecho ocurre en la víspera de un paro nacional convocado por ATE en rechazo a las políticas de ajuste del Gobierno de Javier Milei, que incluyen despidos masivos en la administración pública, recortes presupuestarios en áreas sensibles y una política de confrontación directa con el sindicalismo.
En este escenario, las amenazas contra Aguiar no solo se inscriben en una disputa gremial, sino que se convierten en un símbolo del deterioro del debate democrático y de la creciente naturalización de discursos violentos en la esfera pública.
Desde el gremio, ratificaron que las medidas de fuerza seguirán adelante y que se mantendrán “firmes en la defensa del empleo, el salario y los derechos laborales”, pese a los intentos de amedrentamiento.
“Esperamos que la Justicia actúe con ejemplaridad”, concluyeron desde ATE, en lo que definieron como una defensa no solo del secretario general, sino del conjunto de los trabajadores y de la democracia misma.