Coimas en ANDIS: hermetismo en el PRO y dudas por el rol de Mauricio Macri

La filtración de audios del ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad, Diego Spagnuolo, que describen un esquema de sobornos con ramificaciones en el corazón del Gobierno libertario, salpica al PRO y vuelve a poner bajo la lupa el rol del expresidente Mauricio Macri. Mientras la justicia avanza con allanamientos y secuestros de celulares, reina el silencio en la dirigencia amarilla.
Macri, en silencio y lejos del país
Desde que se conocieron los audios que comprometen a Karina Milei, a su operador Hernán “Lule” Menem y a la droguería Suizo Argentina, Mauricio Macri optó por el silencio. Apenas dos semanas atrás había compartido una reunión privada con Karina Milei por el cierre de listas en CABA. Hoy, en una de las semanas más críticas para el oficialismo, el exmandatario se encuentra en Dinamarca participando del Mundial de Bridge, sin declaraciones públicas ni apariciones de campaña.
Ese mutismo genera especulaciones dentro del PRO. Dirigentes, diputados y funcionarios consultados se negaron a responder sobre la posible vinculación del expresidente con los empresarios Jonathan y Emmanuel Kovalivker, dueños de Suizo Argentina, y con Daniel Garbellini, exfuncionario macrista apartado de ANDIS tras ser mencionado en los audios.
Garbellini, un hombre de la era Macri
Spagnuolo describió en los audios que Lule Menem le impuso a Garbellini como “cajero” dentro de ANDIS. “Es un delincuente que estaba en la gestión de Macri y cuando se fue se llevó los discos rígidos de las computadoras”, señaló.
Garbellini inició su carrera en la gestión porteña de Macri, en 2007, en la Corporación Buenos Aires Sur. Luego fue gerente del Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC), donde quedó ligado al caso Sueños Compartidos por pagos a la fundación de Sergio Schoklender. Ya con Macri en la Casa Rosada, fue asesor en el Ministerio de Salud bonaerense bajo el mando de María Eugenia Vidal, en un área a cargo de Pablo Atchabahian, otro de los nombres que Spagnuolo tildó de “delincuente”.
Su larga trayectoria en estructuras macristas explica la incomodidad actual en el PRO, que evita pronunciarse sobre su situación tras el allanamiento de su vivienda y el secuestro de su teléfono celular.
Los Kovalivker y la cercanía con Macri
El otro vínculo incómodo es el de Macri con Jonathan Kovalivker, de paradero desconocido tras el escándalo. Empresario de perfil alto y dueño de la colección más grande de Porsche en el país, mantenía relación con Lule Menem, a quien invitaba a su casa a “probar los fierros”.
Pero también cultivó lazos con Macri. Circula una foto de ambos posando luego de un partido de pádel, y versiones señalan que a pedido del expresidente la empresa Suizo Argentina realizó aportes de campaña a Milei en el balotaje de 2023. Ese “favor” habría facilitado luego el desembarco de Garbellini en la agencia de discapacidad como administrador de fondos.
Hermetismo amarillo y estrategia libertaria
La dirigencia macrista guarda silencio. Ni legisladores ni funcionarios responden a las consultas periodísticas sobre los lazos de Macri con Garbellini y los Kovalivker. En paralelo, desde la Casa Rosada se busca blindar a Karina Milei: “Karina no se mancha”, repiten en el oficialismo, trasladando la responsabilidad a los Menem.
Mientras tanto, la justicia federal avanza. El juez Sebastián Casanello y el fiscal Franco Picardi ordenaron 15 allanamientos en domicilios y oficinas de ANDIS y de la Suizo Argentina, con resultados significativos: teléfonos celulares, documentación contable y sobres con 266 mil dólares y 7 millones de pesos hallados en un auto de Emmanuel Kovalivker en Nordelta.
Los peritajes de los dispositivos de Spagnuolo, Garbellini y los Kovalivker serán claves para determinar hasta dónde llegaba la red de sobornos y si hubo conexiones políticas más arriba en la cadena.
Una bomba en plena campaña
El escándalo estalla en el inicio de la campaña legislativa, cuando Milei busca blindar su alianza con el PRO en la Ciudad y los gobernadores aliados en el interior. Pero la sombra de Macri sobre los vínculos con los empresarios involucrados y la presencia de exfuncionarios propios en la trama de coimas genera un silencio incómodo.
El mutismo amarillo, lejos de disipar las sospechas, alimenta las dudas: ¿hasta dónde llegan los lazos de Macri con los protagonistas de esta historia y qué rol jugó en los acuerdos que derivaron en el esquema de corrupción denunciado?